• 1 de cada 10 alumnos o alumnas han sufrido algún tipo de acoso durante su vida

El Sargento Alejandro Hernández del puesto de la Guardia Civil de Pinoso ha ofrecido varias charlas sobre acoso escolar al alumnado de Primero de ESO del Instituto José Marhuenda Prats, para tratar de concienciar sobre el acoso y ciberacoso y evitar las consecuencias de esta violencia.

Si bien es cierto que estas charlas son habituales, la pandemia las ha limitado, sin embargo, en el instituto de Pinoso, se han ofrecido de forma excepcional dadas las circunstancias y es que según el director, Miguel Ángel Oliver, ”cuando tuvimos inquietud por parte de familias y profesorado  y vimos que había peligro, en el tema del ciberacoso pedimos las charlas a la Guardia Civil y nos respondieron muy rápido” y añade “queremos prevenir y tenemos que estar encima, a veces no se ve, es difícil de detectar por parte de la familia y del profesorado también”. Tanto la edil de Educación, Silvia Verdú, como  la Guardia Civil han actuado de forma rápida y contundente para evitar y prevenir el acoso, así como concienciar y explicar las diferentes situaciones que pueden provocar serios problemas tanto al acosado o acosada como a los acosadores o acosadoras.

Alejandro Hernández durante la sesión ha hecho hincapié en el hecho de que todas las acciones dejan rastro y tienen huella, para hacerles entender al alumnado que no son inmunes y que a partir de los 14 años tienen todos los actos tienen responsabilidades penales. Previamente a estas charlas con el alumnado, Hernández ya realizó la semana pasada una primera sesión con las familias para explicar el plan director sobre acoso en los centros escolares y advertir de las consecuencias y problemas que ello supone a los y las jóvenes.

En Pinoso no existen datos oficiales sobre acoso escolar, sin embargo, el sargento explica que según las estadísticas, 1 de cada 10 alumnos o alumnas han sufrido algún tipo de acoso durante su vida.

El acoso escolar en el instituto de Pinoso, no supone un problema grave, según el propio director, bien es cierto que también afirma que siempre hay actos de acoso y que cuando estos se conocen se actúa, “la mayoría de las veces a través de mediaciones con las familias que se suelen solucionar en el estadio inicial del acoso, aunque también ha habido casos en los que se han abierto expedientes”.

Oliver también afirma que es necesaria más formación, talleres y concienciación, tanto para el profesorado, como para las familias y el alumnado.