Al consistorio le preocupa la salud y la seguridad de los niños, niñas y profesorado, así como los vecinos, por lo que está tratando de agilizar esta actuación lo máximo posible.
Actualmente ningún punto limpio admite la placa de fibrocemento, por lo que el coste de eliminarla es muy elevado, dado que precisa un tratamiento por personal especializado y ser depositada en puntos habilitados para el tratamiento de dicho residuo. El ayuntamiento ha trabajado en la memoria valorada que ya ha remitido a la Diputación de Alicante y, tal y como confirmaba el alcalde, han aceptado realizar el proyecto, aunque habrá que esperar a la primera modificación de crédito en los presupuestos de 2018 del ente provincial para destinar la suma a la que ascienden los trabajos.
El consistorio ya se encuentra redactando el proyecto de las obras que ascienden a 309.000 euros, trabajo que ha asumido para agilizar los trámites. Una vez obtenida la subvención, que en este caso sería extraordinaria, se abrirá el proceso de presentación de ofertas de empresas y tras la valoración de las mismas, comenzarán los trabajos que se alargaran durante al menos 2 meses. Azorín estima que será en la segunda mitad del año, sin embargo, los mejores meses para realizar los trabajos serían julio y agosto, pero si no fuese así, las aulas probablemente tendrían que permanecer cerradas, aunque valoraran junto al profesorado diferentes opciones para continuar con las clases.
El alcalde, Lázaro Azorín, al que también acompañó la edil de Educación, Neus Ochoa y la Directora en funciones del centro, Ana Bonmatí, afirmó que continuarán informando a la población.