La parada del bus en la carretera de Jumilla comienza a cambiar de imagen, ya que esta semana han comenzado los trabajos de instalación de la nueva marquesina que el consistorio ha adquirido este mismo año, más amplia, moderna y funcional.

De hecho, ya se ha colocado la estructura metálica sobre la que se levantarán los paneles que conformarán la marquesina, que se ubicará más alejada de la fachada de la vivienda colindante, y se está procediendo a eliminar la marquesina antigua, que se encuentra muy deteriorada.

El modelo de marquesina es de mayor tamaño que la anterior, con cerca de 4 metros de largo, proporcionando refugio a más usuarios, sobre todo en caso de mal tiempo.

Su estructura es de acero al carbono con acabado lacado al horno y el banco llevará listones de madera sintética ecológica. Las paredes son de vidrio templado y el techo es una estructura de aluminio con chapa de lacado al horno y panel sándwich lacado en blanco.

Una de las razones para adelantar su ubicación es porque la marquesina dispondrá de sistema de iluminación alimentado con energía solar, con sensor de luz y temporizador.

En un lateral se instalará el llamado MUPI, espacio iluminado que servirá para promocionar diversas campañas de publicidad locales. Igualmente se colocará una columna “Infomónes” en la que se podrán consultar los horarios de los servicios regulares de autobús que ofrecen las empresas de transporte de viajeros, a través de unos paneles de metacrilato.

Las obras no solo consistirán en la sustitución de la marquesina, sino que también se adecuará el espacio que servirá de zona de espera, dotándolo de mayor amplitud y servicios complementarios, como una nueva papelera.

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