Durante el acto, Ríos, que es un gran comunicador, ha dejado patente que tanto la familia como la escuela son los medios más adecuados para educar.
En el caso de la familia, suele ser un modelo a seguir por el niño y adolescente, y se debe aprovechar para fomentar hábitos de vida saludable. Y en el colegio pasan buena parte de su vida. Allí encuentran el mayor riesgo de iniciarse en el consumo de alcohol y otros tipos de sustancias, o bien hacer un mal uso de las nuevas tecnologías y caer en una excesiva dependencia.
En su charla, Antonio Ríos, la ha iniciado con la frase "si es frecuente, no es sano", además con un lenguaje claro y directo, ha expuesto una serie de estrategias que pueden desarrollarse desde el ámbito familiar para prevenir ese consumo abusivo de sustancias y tecnologías, analizado los factores de riesgo, qué pueden o que no han de hacer los padres, cómo actuar ante un posible consumo, o cómo hacerlo correctamente para inmunizarlos sin estigmatizarlos.
Rios ha destacado que en la adolescencia y primera juventud, es donde se quiere experimentar, y que la adicción es el resultado de tres interacciones, persona, medio ambiente y sustancias ( tecnologías o juego), además en la adolescencia es donde se producen los grandes cambios físicos, sensoriales, emocionales, sexuales o de criterios.
Respecto al ámbito educativo, la prevención ha de formar parte de las materias escolares y la normativa de los centros escolares, y conviene seguir desarrollando programas para niños y padres.
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