- La violencia de género dejó huérfanos a 47 menores y se cobró la vida de otros tres, todos ellos asesinados por sus padres biológicos
Durante 2019, 56 mujeres fueron asesinadas por sus parejas o exparejas, acabó con la vida de 3 niños, a manos de sus padres biológicos y 47 menores de edad quedaban huérfanos.
El Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, que analiza las muertes causadas durante 2019 por la violencia de género y por la violencia doméstica en el ámbito de la pareja o expareja, a través de un informe que se divide en cuatro partes: análisis de las muertes de mujeres por violencia de género; estudio de los casos con antecedentes judiciales; muertes de hijos e hijas menores por violencia de género; y muertes por violencia doméstica íntima.
En el capítulo dedicado al estudio de los 12 casos en los que hubo denuncias previas, el informe incluye resúmenes individuales de los expedientes judiciales, una herramienta útil que contribuye a detectar fallos del sistema o debilidades.
En 2019 hubo 56 asesinatos de mujeres a manos de sus parejas o exparejas, lo que supone una muerte por violencia de género cada 6,5 días. A partir de los datos extraídos de los expedientes judiciales se puede concluir que el perfil de la víctima es el de una mujer con una edad media de 44,1 años (45,4 años en 2018) y que en más de la mitad de los casos (64,3 %) mantenía la convivencia con su agresor en el momento en que se cometió el crimen. En cerca de cuatro de cada diez feminicidios (39,3 %), el agresor era el marido de la víctima, el 42,9 % de los casos, mantenían otra relación afectiva. Además el 58,9 % de las víctimas eran españolas y el 41,1 %, extranjeras.
La violencia de género dejó huérfanos a 47 menores en 2019, el 53,6 %, menores de edad. El agresor era el padre biológico del 68 % de los menores que quedaron huérfanos. Si se contabilizan todos los hijos de las víctimas (no sólo los menores de edad), la cifra de los que perdieron a sus madres asciende a 92. El 78,6 % de las mujeres asesinadas eran madres. El domicilio, común o de uno de los miembros de la pareja o expareja, es el lugar donde se cometieron 4 de cada 5 feminicidios (84 %). El método empleado en más de la mitad de los casos (51,8 %) fue el arma blanca. Julio, con el 17,9 %, y el domingo (con el 19,6 %) fueron el mes y el día de la semana que concentraron un mayor número de feminicidios. En términos absolutos, la mayoría de los feminicidios (36, 64,3 %) tuvieron lugar en localidades de entre 10.001 y 250.000 habitantes.
El perfil del autor de los feminicidios cometidos en 2019 corresponde a un varón con una edad media de 48,3 años. El 60,7 % de ellos eran españoles y el 39,3 %, extranjeros. Casi la mitad de los autores de los feminicidios fueron detenidos tras cometer el delito; en un 14,3 % de los casos se entregaron y en un 30,4 %, se suicidaron. En 2019, una de cada cinco víctimas (12, que equivale al 21,4 %) había presentado denuncia previa contra su agresor. Seis de ellas convivían con su agresor en el momento en el que se cometió el crimen.
Las víctimas mortales de 2019 que habían presentado denuncia previa tenían una edad media de 38,9 años. Es significativo que ninguna víctima mayor de 65 años hubiera presentado denuncia. En 4 de los 56 casos del año analizado existía una medida de alejamiento en vigor que el agresor vulneró, en uno de esos casos, víctima y agresor convivían a pesar de la orden de alejamiento, y en dos más la medida había existido con anterioridad, pero ya estaba cancelada.
En 2019, no hubo casos de violencia sexual. La violencia psicológica denunciada por las víctimas consistió principalmente en amenazas de muerte, insultos, desprecios y vejaciones o amenaza de privar a la víctima de sus hijos. La mitad de las víctimas solicitaron la adopción de medidas de protección, en todos los casos, menos en uno, se adoptaron dichas medidas.
Siete de los 16 procedimientos finalizaron con auto de sobreseimiento provisional; en seis casos se dictó auto de apertura de juicio oral, llegándose a celebrar juicios que dieron lugar a cinco sentencias condenatorias y una absolutoria. De las cinco condenas, cuatro fueron de prisión. Los tres restantes procedimientos no llegaron a finalizarse por la comisión del feminicidio.
En 2019, tres menores (dos de 10 años y uno de 15) engrosaron las cifras de muertes por violencia de género. En uno de los casos, el agresor acabó con la vida de la mujer y la de uno de sus hijos, logrando huir el segundo. Los tres menores asesinados eran varones y el agresor, su padre biológico. En todos los casos hubo denuncias previas de las madres. Los agresores tenían una edad media de 40,6 años, siendo dos de ellos de origen extranjero. En dos de los casos, el agresor se suicidó tras cometer el crimen mientras que en el tercero, fue detenido.
Durante 2019, se registraron 9 casos de violencia doméstica íntima, se trata de las muertes violentas de hombres causadas por mujeres y la violencia intragénero. En tres de los nueve casos, existían malos tratos previos de la víctima a su agresora, lo que da lugar a lo que se ha llamado violencia de respuesta. En 2019, todas las víctimas eran hombres con una edad promedio de 57 años y las agresoras, mujeres con una edad media de 50,4 años. Siete de las nueve víctimas eran españolas, nacionalidad que tenían también 5 de las agresoras. En ocho de los casos, víctima y agresora convivían. Un total de 7 menores quedaron en situación de orfandad en 2019 por el asesinato de sus progenitores en agresiones por violencia doméstica íntima. Un tercio de los asesinados (33,3 %) tenía hijos o hijas menores en común con la agresora o de relaciones anteriores. El total de hijos e hijas, independientemente de su edad, que quedaron huérfanos ascendió a 18. El lugar de la agresión fue el domicilio, común o de la víctima, en 7 de los 8 casos de los que se tiene constancia del lugar de los hechos (87,5 %). El arma blanca y la asfixia, los métodos más utilizados (37,5 %).
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NdP_Muertes_2019_ENE 2021 (1)